Generación de bioetanol como combustible alternativo a partir de compuestos lignocelulósicos a nivel laboratorio
Esta investigación se enfoca al aprovechamiento de compuestos lignocelulósicos generados en la central de abastos de Pachuca, Hidalgo para producir bioetanol como un combustible alternativo.
Para su desarrollo, los residuos de frutas y verduras recolectados deben lavarse para luego molerse, obteniendo así los jugos de la pulpa y el bagazo por separado. Por un lado, cuando el jugo y la pulpa alcanzan una consistencia líquida, se adicionan levaduras de piña, y se dejan en reposo por 3 días en recipientes cerrados. Posteriormente se destila la mezcla fermentada. Por otra parte, al producto sólido se le aplica un tratamiento químico con peróxido de hidrógeno, dejando que reaccione en su totalidad. Tras finalizar la oxidación química, se filtra la solución para fermentarla en un recipiente por 5 días. Seguidamente, al finalizar la fermentación se destila el producto. Finalmente, con la ayuda de un polímero absorbente, se remueven las impurezas restantes, separando al etanol del agua. A través de la metodología empleada logra producirse un 3,33% de etanol a partir de la biomasa utilizada por fermentación indirecta y un 5% por fermentación directa.