BIO-LUTIONS trabaja con una red de socios locales, (e.g. la ONG VIKASANA) que colaboran en la recolección de residuos de los pequeños agricultores de la región. Su proceso no depende de un solo cultivo o planta. Hoy en día, usan una amplia gama de residuos agrícolas como materia prima, como paja de trigo, espigas de cáñamo, ortiga, caña, tallos de plátano, sarmientos de vid y muchos más. Esta materia prima es lavada y conservada (a través de prensado y secado). El procesado consiste en convertir mecánicamente los residuos agrícolas en micro y nanofibras autoaglutinantes fibcro ®. Este método patentado elimina la necesidad de agentes aglutinantes o aislamiento químico de celulosa. Posteriormente, utiliza la tecnología de moldeo en húmedo o moldeo en seco (sin agua) para darles la forma de vajilla, siendo posible además moldear y colorear los productos usando colorantes de grado alimenticio, según las necesidades del mercado. El producto final se entrega a clientes locales y tras su uso puede ser quemado eficientemente de forma energética, reciclado, o vertido ya que es biodegradable. El proceso evita la adición de aditivos químicos y logra un bajo consumo energético y de agua.

El establecimiento de instalaciones BIO-LUTIONSes posible en todo el mundo (actualmente han implantado el sistema en Tailandia), ya que son compactas y requieren solo de una infraestructura básica. Dependiendo de la demanda local y la disponibilidad de recursos, es posible abrir múltiples instalaciones en diferentes áreas de cada país, acortando el transporte al punto de venta, reduciendo significativamente las emisiones de CO2. Además, el personal de producción no necesita habilidades técnicas especiales para poder ser capacitado en el sitio, creando empleos locales.